Modelismo naval. Diseño y construcción del modelo de una goleta del siglo XIX

Viene de:

Confeccionado el plano de la cuaderna maestra, conviene ahora hacer la lista de materiales del casco de nuestro “Dos Amigos”. Aviso que, en el momento de escribir estas líneas, aun no había conseguido el material necesario para el codaste, quilla, roda, tajamar y trancanil, de modo que es probable alguna modificación de esta lista, que muestra la imagen 10b.

Elementos de esa lista de materiales, tales como el cartabón bovedilla, espejo, bovedilla, superestructura, forro superestructura, forro espejo, bovedilla y alavantes, no figuran en el plano de la cuaderna maestra, pero he podido completarla porque, en el momento de hacerlo, ya tenía muy avanzado el diseño del casco, comenzado el día 14-1-2019.

Iniciaré ahora el diseño de la sobrequilla (en mí opinión, mal llamada falsa quilla por algunos modelistas), para lo que me referiré a la imagen 11, que es el alzado del plano de la imagen 9 sin las líneas de agua y las longitudinales; en ella está remarcado, en rojo suave, el contorno de dicha pieza para destacarla del resto del plano.

Sobre la sobrequilla se instalarán las cuadernas, el codaste, la quilla, la roda y el tajamar, dando soporte parcial al forro de cubierta, al espejo y la bovedilla, algo que se logra practicando en ella las aberturas (escotaduras dicho en argot naval) necesarias para alojar las cuadernas, los pies de los mástiles y el cartabón que soportará la bovedilla, resultado de lo cual es el plano de la imagen 12, en el que su línea superior es la de cubierta al centro, todas sus líneas continuas son las de corte del contrachapado, y las verticales de puntos son las de contacto sobrequilla-cuaderna cuando éstas estén instaladas sobre aquella; el resto de las líneas de puntos indican hasta donde encajaran los bordes del codaste, quilla y roda sobre la sobrequilla, pues en este diseño la sobrequilla encaja con estas piezas mediante una ranura practicada en todas ellas de 2 mm. de profundidad por 2 mm. de anchura.

Antes de seguir, aclaro que el espesor de las cuadernas desde la maestra hasta la 24, se extiende hacia popa, y desde la B a la Q se extiende hacia proa.

Carezco de un trazador grafico capaz de imprimir completa y a escala 1/1 (del modelo, por supuesto), la sobrequilla o cualquier otra pieza de dimensión superior al folio y, para soslayar esta carencia la imprimo en tres folios, según las imágenes 13, 14 y 15

En esas imágenes son visibles las rayas verticales señaladas con flechas, la A es la misma que la B, y la C la misma que la D, de modo que cortando el folio por la línea B es muy facil unirlo exactamente con la raya A del otro folio, procurando que coincidan también las demás líneas no verticales; repitiendo las mismas operaciones con la raya D, se obtiene el plano completo y a escala 1/1 de la sobrequilla de nuestro “Dos Amigos”. La imagen 15a es la fotografía de la impresión sobre folio de los tres .PDF que contienen las imágenes 13, 14 y 15, y la 16 muestra el resultado de su unión, por lo que ahora es posible transferir el trazado en papel al contrachapado, operación que realizo utilizando papel de calcar, como se aprecia en la imagen 16aa.

La imagen 16ab, muestra el calcado de la sobrequilla sobre el contrachapado.

Abordaré ahora el diseño de los tinteros de los mástiles (palos) de mesana y mayor que, básicamente, se compondrán de dos tacos de madera (no es necesario ninguna especial) a los que se le hará un agujero de 9 mm. para el alojamiento del mástil. Las dimensiones de ambos tinteros serán idénticas, si se exceptúa que al del trinquete es necesario practicarle la abertura necesaria para el alojamiento de la cuaderna, una vez encolado a la sobrequilla. El aspecto de los tinteros es el que muestra la imagen 16 a; en ella se ve una placa de contrachapado, idéntica a la empleada para hacer la sobrequilla, que se mantendrá unida a ambos tacos de madera de forma provisional mientras dure la confección del tintero, terminado el cual se desmontará el conjunto – como se ve en la parte derecha de la imagen – y se desechará la placa de contrachapado, procediendo seguidamente a montar ambos tacos de madera en el sitio de la sobrequilla que les corresponda.

La imagen 16 b muestra el plano de los tinteros, en su parte izquierda en perspectiva y en la derecha en diédrico; las cotas señaladas con un asterisco (*) son las que deben respetarse en mayor grado (reconozco que hablar de décimas o centésimas en madera es como pedir peras al olmo, pero estas son las medidas arrojadas por el CAD que he creído conveniente respetar, al contrario que en otras que he redondeado a la unidad). La imagen 16 c es la de su situación en la sobrequilla, dando por entendido que su parte inferior es paralela al canto bajo de aquella.

El impresentable aspecto de lo mostrado en la imagen 16d, no es otra cosa que el comienzo de la elaboración de los dos tinteros; en ella están señaladas con flechas amarillas los dos tacos de madera, y con la flecha azul el pedazo de chapa con la que está hecha la sobrequilla, también son visibles los cuatro tirafondos que sujetan el conjunto, y un trazado a lápiz que es una grosera aproximación de la longitud de los tinteros.

La imagen 16e muestra una etapa de la confección de estos tinteros tras preparar la superficie señaladas con las flechas, hacer paralela a ella su opuesta, trazar adecuadamente la longitud de los tinteros, trazar los centros de los palos y preparar una cuña (también señalada con la flecha) para facilitar el taladrado.

La imagen 16f muestra un tintero acabado y la 16g desmontado, de la que es obvio decir que la placa señalada con la flecha es la desechable (los tornillos también, claro).

Continúa en:
https://ganandobarlovento.es/modelismo-naval-diseno-y-construccion-del-modelo-de-una-goleta-del-siglo-xix-2/

Modelismo naval. Diseño y construcción del modelo de una goleta del siglo XIX

De todas las aficiones que he tenido en mí vida, creo que la más vieja, arraigada y constante ha sido la de los barcos, por los que siempre he sentido gran fascinacion. Estoy completamente convencido que hubiera sido feliz diseñando y construyendo mi propio barco, pero cuando tuve tiempo para ello, me faltó sitio, materiales, herramental y, sobre todo, me sobraron años, de modo que solo me quedó el recurso de seguir practicando el modelismo naval como forma de alimentar esa fascinación mía.

Hecha esta introducción, paso ahora a describir, de la forma más pormenorizada posible, el diseño y construcción del modelo estático de una goleta – bien es cierto que no es el tipo de modelismo que más me gusta -, pero es a lo que, esta vez, me ha conducido mi afán de hacer algo distinto en modelismo naval. Las técnicas que describiré son solo algunas de las muchas empleadas en modelismo naval, pero aviso que mi talento como modelista es manifiestamente mejorable: el detallito, no se me da; en pintura, hago lo imprescindible; los nudos, se me atragantan; la jarcia, ¡ay la jarcia!

El barco del que es réplica el modelo objeto de este relato era un «schooner» de nombre “Dos Amigos”, diseñado y construido en EE.UU. a finales del primer tercio del siglo XIX. Durante algún tiempo fue utilizado para el repugnante e inhumano tráfico de esclavos negros entre África y Brasil o Cuba y, tras su apresamiento por la Royal Navy, se le cambió el nombre por el de “Fair Rosamond”.

La primera vez que entré en contacto con este «schooner» fue en las páginas del libro «The History of American Sailing Ships» de Howard I. Chapelle, de modo que fue de éste del que he extraído la mayor parte de la información para hacer su diseño. También me he valido de fotografías de modelos ya construidos, aunque existen apreciables diferencias entre unos y otros, con lo que, más de una vez, me he visto obligado a elegir la solución que he creído más apropiada para el tipo y época histórica del barco. Comencé el diseño escaneando el plano de formas del “Dos Amigos”, imágenes 1 y 2, que, además de estar en dos páginas distintas del libro, son imágenes y no planos en su más estricto sentido.

Seguidamente, trasladé estas imágenes a un programa CAD y, sobre ellas, “fusilé” en rojo todas sus líneas, tal como se ve en las imágenes 3 y 4

Naturalmente, los métodos de reproducción de imágenes en libros pueden alterar el dimensionamiento de cualquier plano, sus perpendicularidades, paralelismos o equidistancias por muy bien hecho que esté, por ello deberá comprobarse la corrección de las equidistancias entre elementos (cuadernas entre sí, líneas de agua entre sí, etc.) y, en caso contrario, adoptar las medidas correctoras necesarias para corregirlas. Pondré un ejemplo: la imagen 5 es la ampliación del fragmento encuadrado en azul de la imagen 6, idéntica a la 4; en ella se aprecia que las líneas verticales rojas 1 y 2 – pero sobre todo la 2 – no coinciden exactamente con sus respectivas líneas negras de la parte inferior de dicha imagen. Esto ocurre habitualmente a causa de los sistemas de impresión de libros, y, aunque la diferencia sea mínima, debe corregirse (como atestiguan las líneas rojas), pues tales líneas negras representan tres cuadernas distintas, que normalmente siempre se trazan en los planos de formas equidistantes entre sí. Lo mismo es aplicable a las líneas de agua y a las longitudinales.

Los dos trazados en negro de las imágenes 3 y 4 deben estar a la misma escala (cualquiera es válida), y si ello no fuera así, una de ellas, deberá dimensionarse a la misma escala de la otra – mediante el comando «escala» del programa CAD que se utilice – antes de comenzar su calcado en rojo; hecho lo cual se unirán ambos trazados con la condición de que la última cuaderna de la imagen 3 esté a la misma distancia de la primera cuaderna de la imagen 4, tal como lo son el resto de las cuadernas entre sí, y que las líneas de ambos trazados que deban unirse, lo hagan de forma correcta. El resultado de esta operación es visible en la imagen 7, que ya es un dibujo vectorial (en el ordenador, naturalmente) y no una imagen.

Por si algún modelista tiene dificultades para interpretar los planos de formas, aclararé el significado de algunas de las líneas de la imagen 7, para lo que le he cambiado el color de algunas para facilitar la explicación, dando así origen a la imagen 8.

Las líneas de color magenta son las cuadernas de trazado, que muchos modelistas – incluyéndome a mí – utilizamos también como cuadernas de construcción. En los planos de formas, es costumbre identificar las cuadernas con números arábigos consecutivos empezando desde la 0, que más o menos coincide con el eje de giro del timón de la embarcación en cuestión, sin embargo, no es el caso de este plano cuya primera cuaderna de popa es la nº 22, y las siguientes hacia proa disminuyen su numero de dos en dos, de modo que la que sigue a la 22 es la 20, a ésta la 18, y así sucesivamente, hasta la maestra señalada con su símbolo, y a partir de ella cambia la identificación de números por el de letras, así, hacia proa son la B, D, I,  H, N, M, Q; un método al que no le he encontrado una explicación razonada, pero que he decidido respetar y mantener a lo largo de toda la descripción que sigue.

La línea amarilla es la de regala y su inmediata inferior, en negro, es la de cubierta al costado, que no debe confundirse con la de cubierta al centro, aún no trazada. Las líneas de color azul oscuro son las de agua y, sorprendentemente, es la primera vez que las veo trazadas sin que sean paralelas a la línea base (línea de quilla donde ésta y cuadernas están en contacto). Líneas de color azul claro son las longitudinales, básicamente utilizadas para comprobar la fidelidad de trazado del plano de formas.

Al parecer, en algunos sitios o en ciertas épocas – no lo sé – era costumbre trazar en los planos las unidades de medida utilizadas, y este es el caso del plano del libro que he mencionado, en el que está representada algo así como una regla graduada en pies (ignoro si tiene algún nombre específico), que también he calcado y que señalo con una flecha en la imagen 8. Esta regla es de gran ayuda, pues facilita enormemente el escalado del plano de formas del barco pues, el obtenido hasta ahora, podría llamarse “de escaneado” y sin escala definida. La regla, a la que hago referencia, está graduada de 0 a 90 pies, pero si utilizamos la herramienta de medir distancias del programa cad que estamos usando, comprobaremos que esos 90 pies de la regla no se corresponden con 90 pies reales (27.432 mm), si no con una distancia diferente (sería pura casualidad que fueran exactos), por lo que, ésta última distancia, es necesario transformarla en los 27.432 mm mediante el método de escalado del programa cad que se utilice, tras lo cual, ya tenemos nuestro plano a escala 1/1. Llegados aquí, conviene aclarar que los actuales sistemas por ordenador de diseño naval son de una potencia fenomenal que conozco por referencia, de modo que solo mencionaré los métodos de diseño que uso, probablemente ya anticuados. Dicho esto, creo llegado el momento de proceder a un proceso conocido con el nombre de «corrección de líneas» que requiere cierta dosis de paciencia, para cuya explicación haré referencia a la imagen 9 que representa el plano de formas anterior con sus cuadernas diferentemente coloreadas, una cuaderna adicional, y más líneas de agua de distintas coloraciones. La caja de cuadernas incluye ahora las líneas de agua, así como la cubierta al costado y al centro (puede que la imagen no facilite su diferenciación), tanto sobre ella como en el alzado. Hechas estas aclaraciones, seguiré con el tema de corrección de líneas, para lo que he elegido el punto A (tomado como ejemplo) de la superficie del casco del barco en el que se cortan la cuaderna azul oscuro (nº 16) y la línea de flotación, también en color azul oscuro. Este punto dista del plano de crujía el segmento AC, y de la línea base el segmento AB. Si este punto está correctamente posicionado en el plano se tiene que cumplir AB = DE, y AC = FG, si ello no es así es necesario mover en ese punto la línea de cuaderna, la línea de agua o ambas hasta conseguirlo. Lo dicho para el punto A es aplicable a todos los puntos del casco, por lo que deberá comprobarse la igualdad de distancias para todos los puntos donde haya un cruce de cuadernas con líneas de agua, con longitudinales y de éstas dos últimas entre sí; es tedioso el proceso, pero una vez logrado el objetivo produce unos resultados verdaderamente valiosos, pues, en modelismo, la causa de muchos emplastes, dobles forros y severos lijados es un plano de formas del modelo en cuestión deficientemente trazado, a los que debe añadirse que, en general, las líneas de cuaderna, de agua, de cubierta, longitudinales y de regala, no deben «tener cambios bruscos de perfil».

Explicaré el significado de «cambios bruscos de perfil», para lo cual me valdré del ejemplo de la imagen 10, cuyo trazado “A” representa la línea de agua inferior (la roja) de la imagen 9; esta línea esta modificada en el trazado “B”, en la que está el cambio señalado con la flecha. Este tipo de cambio es muy raro encontrarlo en el casco de esta o cualquier otra embarcación, por lo que deberá evitarse, de modo que, en general, la línea “A” es correcta y la “B” incorrecta.

Así pues, tras dejar igualadas las distancias de todos los puntos del casco de nuestro “Dos Amigos”, en alzado, planta y perfil (o caja de cuadernas), damos por concluido su plano de formas, a falta de algún detalle con escasa relevancia sobre la forma del casco. Seguiremos el proceso de diseño escalando este plano a 1/50 – o a cualquier otra escala que prefiera el modelista -, obviamente el aspecto del plano de formas resultante es idéntico al de la imagen 9, solo que 50 veces más pequeño, y de él obtendremos todas las piezas que sean necesarias para la construcción del casco, para definir la ubicación de los mástiles, para posicionar y diseñar las mesas de guarnición o para cualquier otro elemento relacionado con el casco.

Hasta aquí solo he hablado de simples líneas generadas en una pantalla de ordenador, pero en la realidad estas líneas deben ser soportadas por elementos materiales, tales como contrachapados, láminas o listones de madera; en consecuencia, antes de continuar el diseño, conviene decidir los espesores de ciertas piezas del modelo, y lo normal para ello es hacerlo sobre el plano de la cuaderna maestra según muestra la imagen 10 a. Naturalmente, lo correcto sería diseñar todos los elementos de esta cuaderna a escala 1/50 (como el resto del modelo), pero desconozco cuales fueron sus escantillones reales, de modo que, los he estimado y escalado, pero algunos serían tan “papel de fumar” que decidí dimensionarlos a unas medidas más adaptadas a mis discretas cualidades como modelista.

Continua en: